Avispa
Ancistrocerus haematodes
Brullé, 1839
Orden: Hymenoptera
Familia: Vespidae
Origen: Endémica
Ancistrocerus haematodes
Brullé, 1839
Orden
Hymenoptera
Familia
Vespidae
Origen
Endémica
DISTRIBUCIÓN
Mundial: Endémica de Canarias.
Es bastante frecuente en gran variedad de ambientes, desde la costa hasta las zonas de cumbre.
FENOLOGÍA
IDENTIFICACIÓN
Tamaño: 9 - 12 mm.

Se diferencia rápidamente del resto de avispas similares de coloración negra y roja por tener las tégulas, en la base de las alas, de color negro. El borde anterior del tórax presenta un collar rojo, estrangulado por el centro. El primer terguito es algo más estrecho que el resto del abdomen y posee una banda roja en el margen posterior, más ensanchada a los lados; el segundo terguito también posee una banda roja en el borde, más estrecha y uniforme. Los machos se distinguen por la cara y las mandíbulas amarillas, así como por tener el último segmento antenal rojizo y modificado en forma de garra curvada hacia detrás. Se han descrito tres subespecies con ciertas diferencias en su coloración. La ssp. haematodes (Tenerife y La Palma) posee las patas completamente negras, salvo las tibias delanteras, que son parcialmente rojas. En la ssp. rubropictus (Gran Canaria) las tibias de todas las patas son rojas y presenta además una corta banda transversal del mismo color en el escudete, a veces dividida en dos manchas. La ssp. antelucans (La Gomera y El Hierro) es muy similar a la ssp. rubropictus, diferenciándose por el ápice negro de las tibias.

Ancistrocerus haematodes (hembra), en Euphorbia atropurpurea. Foto: Gustavo Peña.

Ancistrocerus haematodes (macho), en Ruta pinnata. Foto: Gustavo Peña.

PLANTAS VISITADAS

Aunque puede observarse en gran variedad de flores, la mayoría de sus visitas se concentran en Euphorbia. Otras plantas frecuentemente visitadas son Aeonium, Echium, Retama, Foeniculum o Plocama, y algunas Asteraceae, como Sonchus, Argyranthemum o Schizogyne.

CICLO VITAL

Las avispas del género Ancistrocerus nidifican en el interior de huecos tubulares, en paredes, madera o tallos de plantas. Las celdas se disponen en serie, separadas por finas paredes moldeadas con barro. Cada una de ellas es aprovisionada por la hembra con varias orugas de polillas, que servirán de alimento para las larvas.

Menú