FENOLOGÍA
IDENTIFICACIÓN
Imita el aspecto de la abeja de la miel Apis mellifera. El cuerpo es de coloración general oscura y se encuentra cubierto de abundantes pelos marrones a grisáceos. La cara es amplia y prolongada hacia abajo. El abdomen es negro, brillante, con manchas anaranjadas de extensión variable, más reducidas en hembras, siendo habitual observar en las islas ejemplares muy oscuros, en los que apenas se aprecian las manchas.
Visita una enorme diversidad de plantas, tanto nativas como ornamentales y cultivos. Entre las más frecuentadas se encuentran Asteraceae, como Argyranthemum, Sonchus, Pericallis o Asteriscus; Apiaceae, como Foeniculum, Ferula o Astydamia; y Brassicaceae, como Descurainia, Hirschfeldia o Erysimum. También suele acudir a Aeonium, Euphorbia, Echium o Cistus.
Las larvas se desarrollan sumergidas en aguas estancadas con abundante materia orgánica en descomposición, donde se alimentan de microorganismos y partículas en suspensión. Se puede considerar una especie bioindicadora de la calidad ambiental, ya que su abundancia suele estar vinculada a la existencia de aguas residuales, purines animales y otros medios contaminantes.